Luisa - Lo que realmente enfurece al diablo

Nuestro Señor Jesús a Luisa Piccarreta el 9 de septiembre de 1923:

…lo que más aborrece [la serpiente infernal] es que la criatura haga mi Voluntad. No le importa si el alma ora, se confiesa, comulga, hace penitencia o hace milagros; pero lo que más le daña es que el alma haga mi Voluntad, porque como se rebeló contra mi Voluntad, entonces fue creado en ella el infierno, su estado infeliz, la rabia que la consume. Por eso mi Voluntad es infierno para él, y cada vez que ve el alma sujeta a mi Voluntad y conociendo sus cualidades, valor y santidad, siente redoblar el infierno, porque ve el paraíso, la dicha y la paz perdida, ser creado en el alma. y cuanto más se conoce mi Voluntad, más atormentada y furiosa está. —Volumen 16

En efecto, recordad las palabras de Nuestro Señor en la Sagrada Escritura:

No todo el que me dice: 'Señor, Señor', entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: 'Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre? ¿No echamos fuera demonios en tu nombre? ¿No hicimos proezas en tu nombre?' Entonces les declararé solemnemente: 'Nunca los conocí. Apartaos de mí, malhechores. (Mateo 7: 21-23)

A menudo escuchamos decir que, cuanto más cerca estamos del final de esta era, más se enfurece Satanás porque sabe que le queda poco tiempo. Pero tal vez esté más enfurecido porque ve que el Reino de la Divina Voluntad está a punto de aplastar a la bestia de la antivoluntad que él ha creado con tanto cuidado durante el último siglo.  

 

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