Luz – La humanidad sufrirá

San Miguel Arcángel a Luz de María de Bonilla el 28 de septiembre de 2022:

Amado pueblo de nuestro Rey y Señor Jesucristo:

En adoración a la Santísima Trinidad, con honor y en reparación por todos los seres humanos, vengo a vosotros por orden divina. Vengo a pediros una mayor entrega a la Santísima Trinidad, para que las oraciones hechas “en espíritu y en verdad” adquieran la fuerza necesaria para llegar a las almas que, en este momento, tienen mayor necesidad que antes de ser tocadas por la oración de el corazón. Vengo a llamaros a consagraros a nuestra Reina y Madre para que, estando consagrados, seáis adoradores constantes del Santísimo Sacramento del altar.

Debéis ser amor por vuestros hermanos y hermanas, respetando la vida de vuestros semejantes, ayudando a vuestro prójimo en todo lo que necesiten, especialmente espiritualmente. Preséntalos en el camino de la salvación eterna basado en el conocimiento de la Sagrada Escritura, para que sean hacedores de la Ley de Dios y de lo que la Ley comporta, practicantes de los sacramentos y del amor divino, del cual se reciben las gracias para continuar.

El ser humano no ha llegado a comprender cómo en cada acción que realiza, en cada trabajo que realiza y en cada pensamiento genera el bien o el mal. La conciencia de que la oración debe ser “rezada”, y al mismo tiempo puesta en práctica [ 1 ]cf. Santiago 1:22-25 es indispensable en este momento. El ser humano que descuida la fraternidad corre el riesgo de ser piedra de tropiezo para sus semejantes. Sed conscientes de que os encontráis en un tiempo de arrepentimiento y de volveros a Dios, agradándole. Así se romperán las cadenas que os atan, y seréis criaturas nuevas, convertidas y convencidas. 

El que no tiene fe no puede predicar.

El que no tiene esperanza no predicará esperanza.

Quien no es caridad no predicará con caridad.

Quien no es amor no predicará con amor.

El pueblo de la Santísima Trinidad debe saber que la oración concluye con la praxis de lo rezado, para que dé fruto de vida eterna. La fe vacía está muerta [ 2 ]Santiago 2:14-26, y un ser humano sin amor es una criatura vacía. Quien quiera formar parte del pueblo de Dios debe estar dispuesto a elevarse, si es necesario, por encima de sí mismo, para entrar en el camino divino y dejar atrás los andrajos de la locura humana, para vivir en la práctica constante de amar la voluntad de Dios. Dios.

Has descuidado tu estado espiritual; lo habéis minimizado y no queréis renovaros ni poseer un espíritu generoso. El materialismo se ha apoderado de ti hasta el punto de que no distingues cuando actúas por interés propio o por amor. La humanidad será informada de la temida bomba nuclear, y luego el silencio... Se le informará del colapso de la economía y la escasez de alimentos. ¿Y se ha convertido el pueblo de Dios? ¿Son un pueblo convertido?

La humanidad sufrirá y el sufrimiento será oído por toda la creación hasta que la Mano Divina detenga lo que la criatura humana ha realizado. Y sentiréis el peso de la Mano Divina y del pecado cometido contra Dios. La tierra arde y arderá. . . El ser humano no clama a Dios, sino que hace el mal a su prójimo; se levanta en las calles y se convierte en una criatura irreconocible a través de su agresión.

Oren, pueblo de Dios, oren por Italia y Francia: sufrirán a causa de la naturaleza.

Oren pueblo de Dios, oren: la Argentina llorará y en su lamento verá a Nuestra Reina y Madre de Luján porque está y ha sido ofendida.

Oren, pueblo de Dios, oren por España: el pueblo se levantará y la naturaleza los azotará.

Oren pueblo de Dios, oren por México, temblará: su pueblo sufrirá y llorará. 

Amado pueblo de la Santísima Trinidad, el Enviado [ 3 ]Revelaciones sobre el Enviado de Dios: llegará, pero ¿te reconocerá? Verá tanta tiranía en el corazón humano y sufrirá como Cristo. El sentirá la hipocresía en la criatura humana y los llamará a todos a Él [Cristo]. ¡Convertir! Te bendigo con mi espada. Yo te protejo.

 

Ave María purísima, concebida sin pecado

Ave María purísima, concebida sin pecado

Ave María purísima, concebida sin pecado

 

Comentario de Luz de María

Hermanos y hermanas, el cielo nunca nos recordará lo suficiente, una y otra vez, los deberes que implica la oración. La oración es más que repetir, es más que memorizar: es entrar en el amor divino, estar al lado de nuestra Santísima Madre y aprender de ella para ser discípulos de nuestro Señor Jesucristo. Como raza humana, estamos viviendo en un momento serio y, sin embargo, la gente no cree. La unión con Cristo ha sido relegada al olvido; la humanidad ha sido dominada por el materialismo y todo lo que la rodea.

Hermanos y hermanas, necesitamos a Nuestro Señor Jesucristo ya Nuestra Santísima Madre, y necesitamos ser más piadosos. Amemos a Cristo, que voluntariamente dio su vida por cada uno de nosotros. 

Amén. 

Consagración al Inmaculado Corazón de la Santísima Virgen María

Me encomiendo, Madre, a tu protección ya tu guía; No deseo caminar solo en medio de la tormenta de este mundo.

Vengo ante ti, Madre del amor divino, con las manos vacías,

pero con el corazón lleno de amor y esperanza en tu intercesión.

Te suplico que me enseñes a amar a la Santísima Trinidad con tu propio amor,

para no ser indiferentes a Sus llamados, ni indiferentes a la humanidad.

Toma mis pensamientos, mi mente consciente e inconsciente, mi corazón, mis deseos, mis expectativas, y unifica mi ser en la voluntad Trinitaria,

como tú lo hiciste, para que la Palabra de tu Hijo no cayera en balde.

Madre, unida a la Iglesia, cuerpo místico de Cristo, sangrando

y despreciado en este momento de oscuridad,

Elevo a ti mi voz en súplica, para que las discordias entre los hombres y los pueblos sean destruidas por tu amor maternal.

Hoy te consagro solemnemente, Madre Santísima, toda mi vida desde mi nacimiento. Con pleno uso de mi libertad, rechazo al demonio y sus maquinaciones, y me encomiendo a tu Inmaculado Corazón. Tómame de tu mano desde este momento, y en la hora de mi muerte, preséntame ante tu Divino Hijo.

 

 

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Notas a pie de página

Notas a pie de página

1 cf. Santiago 1:22-25
2 Santiago 2:14-26
3 Revelaciones sobre el Enviado de Dios:
Publicado en Luz de María de Bonilla, Mensajes.