Mis amados hijos, ved el Sagrado Corazón de Jesús unido a mi Inmaculado Corazón. Están unidos por el Espíritu Santo, que se opone al espíritu corrupto de este mundo. Pidan al Espíritu Santo que los una tan estrechamente a nuestros Sagrados Corazones que sus vidas se vuelvan virtuosas y santas, así como nuestros Sagrados Corazones son virtuosos y santos. Proteged vuestras almas con ferviente oración y pura fe, para que Satanás no os envenene con su odio y maldad. Nuestros Sagrados Corazones y San Miguel Arcángel están cerca de ti. Confiad en nuestra protección. Hijos míos, combatid y reprimid el mal con la verdad de la fe. Los sumerjo en el amor del Corazón de Jesús y el mío.
Publicado en Martín Gavenda, Mensajes.