Queridos hijos, vuestra victoria está en el Señor. No te alejes de Él. Te diriges hacia un futuro de espesa oscuridad espiritual. La falta de amor a la verdad provocará la muerte espiritual de muchos de mis pobres hijos. Muchos consagrados caminarán contra la verdad, y el dolor será grande para los justos. Los enemigos están planeando acciones que harán que muchos que son fervientes en la fe se vuelvan indiferentes. Pase lo que pase, permaneced con Jesús y no os desviéis de las enseñanzas del verdadero Magisterio de Su Iglesia. Dame tus manos y te llevaré a la victoria. No olvides: en todo, Dios primero. Este es el mensaje que os doy hoy en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reuniros aquí una vez más. Os bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Estar en paz.
Queridos hijos, la humanidad se dirige hacia el abismo espiritual y pocos permanecerán firmes en la fe. En Dios no hay medias verdades. Doblad vuestras rodillas en oración, porque sólo así podréis soportar el peso de las pruebas por venir. Sea honesto en sus acciones. El cielo es sólo para los justos. Estás en el mundo, pero no eres del mundo. Escúchame. Este es el mensaje que os doy hoy en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reuniros aquí una vez más. Os bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Estar en paz.
Queridos hijos, os amo tal como sois y os pido que busquéis por todas partes para dar testimonio de mi Hijo Jesús. La humanidad se ha alejado del Creador y Mis pobres hijos caminan como ciegos guiando a ciegos. Vuélvanse a Jesús y abracen la luz de la verdad. No te alejes de la oración. Cuando estás lejos, te conviertes en un objetivo del Diablo. Vosotros sois del Señor, y debéis seguirlo y servirle sólo a Él. Estás viviendo en el tiempo de la gran batalla espiritual. Confesión, Eucaristía, Santo Rosario, Sagrada Escritura y fidelidad al verdadero Magisterio de la Iglesia: estas son las armas para la gran batalla. Te diriges hacia un futuro de grandes pruebas. Los que aman la verdad serán perseguidos y llevados ante los tribunales. Todavía verás horrores en la tierra. No te retires. Pase lo que pase, quédate con Jesús. Recuerda: en Dios no hay medias verdades. ¡Sigue adelante por el camino que te he señalado! Rezaré a Mi Jesús por vosotros. Este es el mensaje que os doy hoy en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reuniros aquí una vez más. Os bendigo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Estar en paz.
Publicado en Mensajes, pedro regis.